El brote de gripe A en Estados Unidos ha obligado a cerrar temporalmente 433 colegios de todo el país, lo que ha afectado a 245.500 estudiantes, informó hoy el Departamento de Educación.
Las autoridades de EE.UU. han recomendado con firmeza a los colegios que suspendan inmediatamente sus actividades si se sospecha que uno de sus alumnos puede ser portador del virus AH1N1, que ya ha causado una muerte en el país.
Con esta medida, se pretende acotar los focos del virus y reducir su fácil propagación por las vías respiratorias.
Según el Departamento de Educación, un total de 433 escuelas de 17 estados han seguido este consejo, lo que ha dejado fuera de las aulas a 245.449 escolares.
La secretaria de Seguridad Nacional, Janet Napolitano, y el propio presidente del país, Barack Obama, han recomendado a las empresas y a las familias que tengan un plan de contingencia en caso de que los colegios de sus hijos cierren y tengan que quedarse en casa unos días, hasta que pase el peligro de la gripe.
Según los últimos datos del Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés), el número de afectados en todo Estados Unidos aumentó a 141, repartidos en 19 estados