La salida de Mexicana de Aviación provocará a Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA) la pérdida de cinco mil millones de pesos, por lo que existe la posibilidad de que deba recurrir a un recorte de personal.
El director del organismo, Gilberto López Meyer, dijo en entrevista que lo anterior se debe a que existe un “sobrante de infraestructura” desde que la aerolínea dejó de operar, por lo que se llevará a cabo una reestructuración en la empresa.
El titular de ASA detalló que la compañía consumía entre 15 y 20 por ciento del total de la venta de combustible que comercializaba el organismo, es decir, cerca de 500 millones de litros de turbosina.
“Nos sobra infraestructura en este momento, personal, vehículos. Estamos enfrentando de un día para otro una situación de que una sexta parte de nuestro consumo ya no se está dando, y estamos tratando de ajustar nuestros costos para que el impacto sea el menor posible”.
Por ello, dijo que eventualmente esta situación implicaría un recorte de personal, ajuste de los tiempos extras, así como cero retiros anticipados, entre otras medidas.
“Nosotros manejamos la flexibilidad de tiempos extras, pero francamente este tipo de reducciones se refleja en una disminución sensible de los tiempos extras que pagamos a nuestros trabajadores y pudiera haber algunos recortes en algunas estaciones”.
Tras participar en la Consulta Pública para la Elaboración de una Nueva Política Aeronáutica, aclaró que la caída no es tan grande, porque otras aerolíneas han empezado a volar más y han comenzado a cubrir parte de lo que estaba cubriendo Mexicana.