La Fiscalía General del Estado (FGE) confirmó el hallazgo de 60 cuerpos en un crematorio abandonado en Acapulco, entre ellos existen cadáveres de mujeres, hombres y niños, que están perfectamente embalsamados, sin poder determinar su edad, los cuales están preparados para su cremación.
En un comunicado informó que los cuerpos fueron trasladados al Servicio Médico Forense en el puerto de Acapulco y se les aplicarán los estudios de antropología forense, genética, criminalística de campo, fotografía forense, medicina forense y odontología forense para establecer la causa legal de la muerte y así determinar mediante el cronotodiagnóstico la fecha y hora probable de su deceso.
Por estos hechos se encuentra declarando la presidenta de la Asociación de Funerarias del Estado de Guerreo, así como los responsables de las funerarias de la ciudad de Acapulco.
Además las autoridades solicitaron que presenten los contratos celebrados entre los servicios funerarios con el crematorio, quienes manifiestan entre otras cosas, que el crematorio se encuentra cerrado desde hace un año, por quiebra o fraude hacia los deudores.
La Fiscalía detalló que el hallazgo se realizó tras una denuncia al Centro de Control y Comando C4 en el municipio de Acapulco por lo que la agencia del Ministerio Público de El Coloso inició la averiguación previa TAB/COL/01/0051/2015 en contra de quien resulte responsable, por la posible comisión de los delitos contra el respeto a los cadáveres o restos humanos, y contra las normas de inhumación y exhumación, y atentado contra los muertos, previstos por los artículos 216 y 217 del Código Penal del Estado de Guerrero y los delitos que resulten.
El negocio de nombre “Cremaciones Pacífico S.A de C.V” se ubica en la carretera Cayaco-Puerto Marqués, en la localidad de Llano Largo, municipio de Acapulco, Guerrero, propiedad de Guillermo Estua Zardain.