Las embestidas en Guanajuato se registraron en las instalaciones de la Subprocuraduría de Justicia de Irapuato y casi en forma simultánea en las oficinas de la Policía Ministerial de Silao.
El comando que atacó las instalaciones de Irapuato -que se localizan en el interior del Centro de Readaptación Social- utilizó granadas de fragmentación y armas de alto poder, dejando un saldo de dos muertos, uno de ellos policía ministerial y siete heridos de gravedad, además de ocho automóviles incendiados, informó en conferencia el director de la Policía Municipal, Wenceslao Cedillo.
También al filo de las 20:40 horas fueron atacadas -con granadas de fragmentación y a tiros- las oficinas de la Policía Ministerial ubicadas en la carretera Silao-San Felipe, donde se reportaron seis heridos.
El secretario de Seguridad Pública del estado, Baltazar Vilches Hinojosa, dijo que se desplegó un operativo con fuerzas federales, para blindar la entidad y evitar nuevos ataques.
A las 24:00 horas, la Procuraduría de Justicia del estado no terminaba de hacer la valoración sobre las víctimas.