A pesar de las referencias de que hay suficientes vacunas contra el sarampión, una enfermedad mortal creciente y de la que ya brotó un caso en México, las entidades federativas prevén aplicar alrededor de seis millones de dosis, que parecieran insuficientes para los más de 25 millones de niñas y niños menores de 11 años que hay en el país.
La justificación, aparentemente, es que la población está dejando de llevar a sus niños a vacunarse.
Desde el 28 de febrero, la Secretaría de Salud de la Ciudad de México arrancó una campaña de vacunación intensiva contra el sarampión, con 126 mil vacunas disponibles; el Sistema de Salud de Guanajuato inició el 26 de febrero la aplicación de 195 mil dosis; el resto de los estados tiene un cálculo aproximado de entre 100 mil y 200 mil vacunas por entidad, con el compromiso de resurtir, una vez que se termine ese stock, coincidieron diversas fuentes consultadas por este diario.
Sin embargo, “aunque cada estado tiene sus propias gestiones y procedimientos para la aplicación de la misma, la población ha dejado de vacunarse”, aseguró a La Razón la secretaria de Salud de Guanajuato, Ligia Arce Padilla.