El papa Benedicto XVI condenó hoy en el Vaticano la eutanasia y dijo que el apoyo a la misma “golpea el corazón” de la concepción cristiana de la defensa de la dignidad de la vida humana.
El Papa así lo manifestó en el discurso que dirigió a los obispos de Escocia, que se encuentra en el Vaticano en visita “ad limina apostolorum”, la que están obligados a realizar al Pontífice todos los prelados del mundo cada cinco años.
Durante el encuentro, el Pontífice confirmó que visitará Gran Bretaña este año y que hará una escala en Escocia. Aunque todavía no ha sido anunciada oficialmente por el Vaticano, según la iglesia católica británica, la visita será del 16 al 19 de septiembre.
El Papa Ratzinger animó a los prelados a “enfrentarse con firmeza” ante los desafíos que presenta “la ola creciente de secularismo” que invade Gran Bretaña.”El apoyo a la eutanasia golpea el corazón de la concepción cristiana de la dignidad de la vida humana.
El avance de la ética moderna y algunas prácticas repugnantes en el campo de la embriología son motivos de preocupación”, subrayó el Papa.
El Obispo de Roma pidió a los obispos que exhorten a los creyentes a ser fieles al Magisterio de la Iglesia, “manteniendo y defendiendo la mismo tiempo el derecho de la Iglesia a vivir libremente en la sociedad de acuerdo con sus creencias”.
El Papa manifestó que la Iglesia ofrece al mundo una visión positiva e inspiradora de la vida humana, de la “belleza” del matrimonio y de la paternidad.
El Pontífice lamentó que muchas veces la doctrina de la Iglesia es percibida “como una serie de prohibiciones y posiciones retrógradas, mientras que la realidad es que es creativa y donante de vida y dirigida a la realización más completa del gran potencial de bien y de felicidad que Dios ha puesto en cada uno de nosotros”.
Benedicto XVI se refirió también a la división de los cristianos, que en Escocia se ve ampliamente con la presencia de tres iglesias cristianas, y les animó a proseguir en el camino hacia la unidad