Sicólogos señalan que es muy cierta la frase que dice â??cuando el hambre entra por la puerta el amor sale por la ventanaâ?
â??El amor no es para siempreâ?. ¿Cuántas veces hemos escuchado esta frase? Pareciera que sólo es un dicho trillado, pero las estadÃsticas nos indican lo contrario.
Sucesos como la crisis económica, la infidelidad, la monotonÃa y el individualismo han puesto en evidencia que dicha oración es más que un simple proverbio, lo cual se ve reflejado en el creciente número de divorcios en México.
De acuerdo con los datos más recientes del Instituto Nacional de EstadÃstica y GeografÃa (INEGI), los procesos de separación concluidos sumaron 81 mil 851 en 2008, cifra que representó un incremento de cuatro mil 596 respecto a 2007, es decir, un aumento de 5.9 por ciento.
En tanto, se contabilizaron 589 mil 352 matrimonios en el paÃs. La edad promedio al momento de contraer nupcias en los hombres fue de 28.3 años por 25.5 de las mujeres.
Lo interesante es cuando observamos la relación que existe entre el número de matrimonios y el de divorcios.
De acuerdo con las EstadÃsticas Vitales de 2008, en el paÃs se registraron 13.9 separaciones legales por cada 100 matrimonios. En 2007 y 2006 la relación fue de 13 y 12.3, respectivamente.
En opinión de MarÃa Isabel Gutiérrez, académica de la Universidad Panamericana, una de las principales causas de que un hombre y una mujer decidan divorciarse, es el fenómeno de la individualización, y es que, explicó, en muchos de los casos, ambas partes sólo buscan satisfacer sus intereses personales y no los de la pareja. â??Pretenden tener todas sus necesidades cubiertas y se les olvida que existe la otra parte y que el compromiso es en todos los aspectosâ?, comentó.
Comúnmente, dijo, las parejas contran nupcias sin conocer los derechos y obligaciones que genera un matrimonio, lo cual, aunado a las â??altas expectativasâ? que tienen de éste, termina por generar un â??rápido desencantoâ?, que, a su vez, se traduce en monotonÃa e infidelidad.
La académica reconoció que la crisis económica es un factor que afecta los matrimonios