Autoridades del estado de Michoacán, en el este de México, dijeron este martes que esperan cerca de 500 mil turistas, en su mayoría mexicanos, durante las vacaciones de Semana Santa, pese a los temores ante la creciente ola de violencia ligada al narcotráfico.
Ese estado, donde tiene su sede la llamada Familia Michoacana, un violento cartel del narcotráfico, espera ingresos por el turismo cercanos a los 757 millones de pesos (unos 58 millones de dólares), indicó a la AFP Genovevo Figueroa, secretario de turismo del estado.
Figeroa no entregó una estimación del número de extranjeros entre los turisas. El funcionario explicó que el gobierno, ayuntamientos y comités ciudadanos programaron 900 eventos en el estado, que desde hace dos semanas se puede consultar en portales de Internet.
La violencia relacionada con el narcotráfico cobró más de un centenar de víctimas el fin de semana prolongado por la fiesta de Benito Juárez que culminó el lunes. De ellos, 45 ocurrieron en Guerrero, el estado vecino a Michoacán, donde se ubica el concurrido balneario de Acapulco.
Estados Unidos y Canadá reiteraron la recomendación a sus ciudadanos para no viajar a Ciudad Juárez, la urbe mexicana vecina de El Paso (Texas), donde el sábado fueron asesinados dos estadounidenses, una de ellas funcionaria consular, y el esposo mexicano de otra empleada de esa delegación.
México, el país con mayor afluencia de turistas en América Latina, espera en 2010 cerca de 23 millones de visitantes e ingresos de unos 13.000 millones de dólares, según estimó en diciembre la secretaría de Turismo