LÃderes de 46 naciones del mundo comenzaron a llegar ayer a la capital de Estados Unidos para participar en la Cumbre de Seguridad Nuclear convocada por el presidente Barack Obama, a fin de buscar consenso en el resguardo de materiales nucleares.
Obama ha identificado el terrorismo nuclear como â??la amenaza más inmediata y extrema a la seguridad globalâ? y quiere que todos los materiales nucleares alrededor del mundo estén debidamente asegurados en el plazo de cuatro años.
Ayer, el presidente dijo a la prensa que si Al-Qaeda adquiriera armas nucleares â??no tendrÃa reparo en usarlas. Precisó que el foco de la cumbre es el hecho de que â??la mayor amenaza a la seguridad estadounidense, tanto a corto como a mediano y largo plazo, serÃa la posibilidad de que una organización terrorista obtenga un arma nuclear, lo que podrÃa cambiar el panorama de seguridad en este paÃs y en todo el mundo durante los años por venirâ?.
En la capital estadounidense se desplegó uno de los mayores dispositivos de seguridad en su historia. La cumbre, considerada una de las más grandes de su tipo en décadas, ha sido declarada por el director del Servicio Secreto, Mark Sullivan, como un â??evento especial para la seguridad nacionalâ?. Un acontecimiento de la categorÃa de una investidura presidencial.
La policÃa blindó desde ayer algunos de los hoteles más emblemáticos de la capital y aunque las autoridades no habÃan revelado el número de agentes asignados a este operativo, la cifra superará la de septiembre de 2009, cuando seis mil policÃas y soldados de la Guardia Nacional controlaron la seguridad de los mandatarios del G-20 en Pittsburgh.
En esta reunión, EU buscará aprovechar el impulso que el tema ha ganado a partir de la firma con Rusia del START II, luego de que Obama diera a conocer su nueva doctrina sobre el poder nuclear. A decir de expertos, el principal propósito de la reunión será lograr consenso sobre la amenaza que presenta la proliferación de materiales nucleares y lograr adhesiones a los tratados que existen al respecto, como el de No Proliferación Nuclear, firmado y ratificado por 143 paÃses incluidos EU, Reino Unido y Rusia.
Tres de los paÃses asistentes, India, Paquistán e Israel, no son signatarios del acuerdo adoptado en 1968 y del cual Corea del Norte optó por retirarse en 2003.
La participación de China resulta de suma importancia para EU, que busca trabajar con Beijing y Moscú para asegurar una nueva ronda de sanciones contra Irán por su programa nuclear.
La presencia del presidente chino Hu Jintao fue confirmada casi de último momento, sumándose a otros como Dmitri Medvedev de Rusia, Manhoman Singh de India y Jacob Zuma de Sudáfrica. Un ausente entre los invitados será el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, quien canceló su participación de último momento, buscando asà evitar ser blanco de crÃticas por Egipto y TurquÃa en torno al programa nuclear israelÃ.
Obama se reunió ayer con el premier indio y con sus homólogos de Kazajistán, Sudáfrica y Paquistán.
De América Latina se contará con la presencia de los presidentes de Chile, Argentina, Brasil y México. En un comunicado de la Presidencia, México dijo que apoyará el reforzamiento de las medidas de seguridad sobre materiales nucleares, respaldará a la Agencia Internacional para la EnergÃa Atómica como institución reguladora e insistirá en reforzar al Comité 1540 sobre No Proliferación de Armas de Destrucción Masiva.
El presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, habló al diario El PaÃs de la necesidad de tomar en serio el tema del desarme mundial, pues â??no podemos admitir que haya un grupo de paÃses armados hasta los dientes y otros desarmadosâ?.
Según el borrador del comunicado final, al que tuvo acceso The Wall Street Journal, se pedirá un enjuiciamiento más rigu- roso de los traficantes, registro más metódico de los materiales nucleares y una mayor cooperación global