El oro incursionó de nuevo en precios récord cuando los inversionistas temerosos de la inflación elevaron el jueves su cotización hasta el umbral psicológicamente importante de mil 300 dólares por onza.
El metal precioso ganó 4,20 dólares y terminó por primera vez en 1.296,30 dólares la onza (alrededor de 30 gramos), al acumularse los incrementos que tuvo luego de que la Reserva Federal anunció el martes que podría adoptar nuevas acciones para estimular la economía de Estados Unidos.
Los inversionistas compran oro cuando quieren protegerse de la inflación, y al parecer la declaración de la Fed atizó la inquietud de que el valor del dólar seguiría disminuyendo.
Si el oro rebasa los mil 300 dólares por onza, es probable que suba un poco más y continúe en esos niveles por cierto tiempo, consideró el analista Carlos Sánchez de la firma CPM Group.
“Ese es visto de manera técnica como un nivel de resistencia”, explicó Sánchez. Si el oro supera esa barrera, los inversores se sentirán animados a cotizarlo incluso más alto. “La próxima alza podría ser de entre 1.320 ó 1.300 dólares”, afirmó.
Los precios del oro casi se han duplicado desde el 2008, cuando una oleada de pánico en torno a la economía estremeció a los mercados crediticios del mundo, y los bancos centrales respondieron inundando los mercados de dinero.
Desde entonces, los temores a la incertidumbre sobre la economía global y la inflación han impulsado a los inversionistas a cambiar dinero de acciones y efectivo por oro