Diana Rivera es hermana de una de las vÃctimas de Tlatelolco, su hermano Guillermo (Chomy) era un adolescente de 15 años en el momento de ser abatido y muerto por tres impactos de bala. Asistió al mitin de Tlatelolco sin pertenecer a ninguna organización.
Ella también se dirigÃa hacia allÃ: «Sin embargo, ya no pudimos entrar a la plaza. Los soldados habÃan bloqueado la zona y nosotros nos quedamos atrás de los tanques. Unos jóvenes que huÃan nos dijeron: â??Están matando a todo mundoâ?. No habÃa necesidad de que nos lo dijeran; nosotros escuchábamos los disparos y olÃamos la pólvora.
Pensamos en ese momento que la represión era más selectiva, que sólo se disparaba contra los dirigentes. No imaginábamos que el tiroteo fuera contra el grueso del mitin». Su hermano cayó herido de muerte tras los primeros disparos, supieron que lo habÃan trasladado a un hospital militar y que allà falleció, persiguieron a la ambulancia que transportaba el cadáver: «Aquella persecución fue una pesadilla, no sabÃamos adónde llevaban el cuerpo.
Seguimos a la ambulancia que entró finalmente al edificio del Servicio Médico Forense. Allà vi una de las cosas más espantosas de mi vida: las planchas eran insuficientes, por lo que estaban repletas de cadáveres amontonados, unos encima de otros. HabÃa cuerpos de niños, de niñas, de mujeres embarazadas… HabrÃa algunos 200 cadáveres de gente masacrada. La misma escena cuya foto vi después publicada en la revista ¿Por qué?, que dirigÃa Mario Menéndez. Esa foto yo la vivÃ. Yo vi esa escena».
â?¦ nos dijeron que solamente podÃamos sacar el cadáver de mi hermano si testimoniábamos, en el acta de defunción, que habÃa muerto por otra causaâ?¦No nos quedó más alternativa que dejar asentado que mi hermano murió por otras causas, ahorita ya ni recuerdo cuálesâ?¦Diana considera que será imposible investigar los hechos basándose en actas ministeriales o en certificados de defunción, puesto que en aquel entonces los familiares fueron obligados a poner otras causas de las muertes. «Más que por las actas, la investigación tendrÃa que guiarse por testimonios de los familiares de las vÃctimas. Pero entre nosotros nunca hubo contacto. No habÃa esa conciencia del derecho que hay ahora