Por El Enigma
Ayer tuve una junta con personas para un negocio en redes sociales y curiosamente me dijeron que â??ellos no creÃan en la magia de las redes socialesâ?.
Ese comentario me hizo reflexionar en unos instantes y mentalmente dije â??¿que diablos haces aquÃ?â?, por poco me levanto de la mesa y me dejaba de tonterÃas, vamos, para que perder su tiempo (y el mio), pero me quede y termine la reunión como una persona ética.
Hoy me entero que Barack Obama va por la mÃstica que le llevo a la presidencia de Estados Unidos, la magia de Facebook y asÃ, subir de nuevo su popularidad para ver si le alcanza el tiempo y reelegirse.
Hace casi 4 años Barack Obama tenÃa una estrategia para difusión más amplia que muchos de sus amigos opositores etc. ya que la difusión que le dio no era comparable con otros medios tradicionales.
Es cierto, aunque existen métricas y estadÃsticas para ver el crecimiento de la popularidad de una página, un perfil en facebook o quizá el crecimiento en influencia de un perfil en twitter, nadie hasta el momento podrá decir con la certeza que las estadÃsticas dan, que un porcentaje de esos seguidores, votara en la intimidad de la urna, por equis o ye candidato.
El primer paso que dará Obama y su administración será que el sistema de alarmas terrorista se dará a conocer de otra forma, primero por redes sociales.
Recapacitemos, ¿ok?
La â??magiaâ? de las redes sociales es porque tienen un leguaje a través de un canal con un código especifico, ¿vale?, la interacción que convierte al emisor luego en receptor y viceversa ayuda a que el circuito de la comunicación se cierre; ¿vamos bien?, ok, el no reconocer que toda empresa, institución o partido polÃtico necesita una presencia en redes sociales, es estar en la época del descubrimiento de la imprenta cuando hay opciones como iPads.
Cada quien, quizá el costo en una red social por una campaña efectiva de comunicación es de entre el 15 y el 25 por ciento de lo que puede costar la misma campaña, en un medio tradicional.
Si Obama regresa a Facebook � ¿quizá y algo de razón tenemos algunos, no?