Recuerdo cuando comenzó hace casi 5 años la guerra contra el crimen organizado. Había hechos de violencia muy fuertes y cada vez había más fotógrafos de medios de comunicación que lograban unas capturas de imagen, que ponían de punta los pelos.
Pero conforme ha avanzado la guerra contra el crimen organizado, los grupos delictivos han avanzado en sus métodos para ejecutar a gente de bandas rivales, informantes o denunciantes. Ya estamos lejos de los días que aparecían ensabanados, ahora los ponen en trozos frente a oficinas gubernamentales o los tiran en céntricas calles de la ciudad desollados de rostro para poner la piel en otro punto de la ciudad o los cuelgan en transitadísimos puentes para que todo mundo vea cuan malos son y como lo hacen para además, infundir miedo.
¿Sabe que es lo peor de todo?, que no creo que hayamos visto todo y algo mas vendrá a sorprendernos aunque mucha gente diga que ya no se asusta con nada y su capacidad de asombro sea cada vez más reducida.