Economía sin dolor.
M.P.P. Gonzalo J. Suárez P.
Twitter: @gjsuap
El pasado lunes 17 de septiembre, Marcelo Ebrard presentó ante la Asamblea Legislativa su sexto informe de gobierno. De él, hay cinco aspectos que me interesa destacar aquí:
1.- Inversión en educación. Pasó de 1,200 millones en 2006 a casi 5,000 millones en 2012. Esto no sólo porque se ampliaron proyectos ya existentes –como la Universidad Autónoma de la Ciudad de México y el Instituto de Educación Media Superior, que crecieron 50% en sus presupuestos- sino porque se crearon el Fideicomiso Educación Garantizada, la propia Secretaría de Educación, el Insituto de Ciencia y Tecnología del Distrito Federal y se ampliaron y fondearon otros proyectos. Esto implica un aumento de más de 280% en seis años para este tema. Nada despreciable. Sólo el programa Prepa Sí apoyó a más de 530,000 estudiantes de escuelas públicas de nivel medio superior a continuar sus estudios.
2.- Mejora en seguridad. Reportaron una reducción del 11% en delitos graves en lo que va del sexenio. En contraste, el país se deterioró al aumentar en 40% el mismo indicador. Ayudaron los cambios en la policía, la instalación del sistema de videovigilancia y cambios en la labor de la Procuraduría General de Justicia. Nada mal.
3.- Dejamos de ser “el patito feo” del mundo en materia de contaminación. De ser una de las ciudades más contaminadas del planeta, pasamos a apoyar transporte público como el metrobús, la bicicleta a través de Ecobici y la construcción del Sistema de Transporte Colectivo línea 12, de Tláhuac a Mixcoac, por lo pronto.
4.- Aún así, el Jefe de Gobierno no dejó de reconocer al gobierno federal su coordinación y apoyo, particularmente en el rubro de transporte masivo. “Dos mil millones de pesos adicionales llegaron este año a la línea 12 del metro gracias a las gestiones del Secretario de Comunicaciones y Transportes, aquí presente. ¡Gracias, Dionisio!” le dijo a Dionisio Pérez-Jácome.
5.- Comentó que lo que se había logrado no había sido sólo por él: tuvo un gran equipo de apoyo a lo largo de los años, y, sobre todo, “se logró gracias a la paciencia, empuje y exigencia de los habitantes de la capital”. Lo cual es cierto: todos los que hemos padecido el aumento de tráfico por el mayor programa de obras viales de los últimos cuarenta años nos tuvimos que armar de paciencia para soportarlo… aunque pronto terminarán. Y lo que se hizo es apenas el 20% de lo que se necesita actualmente, dejen ustedes lo que hace falta para seguir creciendo.
Quiero destacar que no fue un informe de “logros personales”, sino que, en algo realmente atípico, el funcionario reconoce que se logró con el aporte de la sociedad. Y como bien dijo el coordinador de la bancada opositora panista, Federico Döring: “hay que reconocerle que es el primer Jefe de Gobierno que concluye su gobierno, completo, y no se va a buscar otro cargo”. En fin, que en el balance, la gestión de Marcelo Ebrard termina positiva. No en balde el candidato a sucederlo logró más del 70% de los votos ante uno de los electorados más informados, críticos y propositivos del país: el de la Ciudad de México. Bien por los logros, a continuar las tareas pendientes.
M.P.P. Gonzalo J. Suárez P.
Twitter: @gjsuap
El pasado lunes 17 de septiembre, Marcelo Ebrard presentó ante la Asamblea Legislativa su sexto informe de gobierno. De él, hay cinco aspectos que me interesa destacar aquí:
1.- Inversión en educación. Pasó de 1,200 millones en 2006 a casi 5,000 millones en 2012. Esto no sólo porque se ampliaron proyectos ya existentes –como la Universidad Autónoma de la Ciudad de México y el Instituto de Educación Media Superior, que crecieron 50% en sus presupuestos- sino porque se crearon el Fideicomiso Educación Garantizada, la propia Secretaría de Educación, el Insituto de Ciencia y Tecnología del Distrito Federal y se ampliaron y fondearon otros proyectos. Esto implica un aumento de más de 280% en seis años para este tema. Nada despreciable. Sólo el programa Prepa Sí apoyó a más de 530,000 estudiantes de escuelas públicas de nivel medio superior a continuar sus estudios.
2.- Mejora en seguridad. Reportaron una reducción del 11% en delitos graves en lo que va del sexenio. En contraste, el país se deterioró al aumentar en 40% el mismo indicador. Ayudaron los cambios en la policía, la instalación del sistema de videovigilancia y cambios en la labor de la Procuraduría General de Justicia. Nada mal.
3.- Dejamos de ser “el patito feo” del mundo en materia de contaminación. De ser una de las ciudades más contaminadas del planeta, pasamos a apoyar transporte público como el metrobús, la bicicleta a través de Ecobici y la construcción del Sistema de Transporte Colectivo línea 12, de Tláhuac a Mixcoac, por lo pronto.
4.- Aún así, el Jefe de Gobierno no dejó de reconocer al gobierno federal su coordinación y apoyo, particularmente en el rubro de transporte masivo. “Dos mil millones de pesos adicionales llegaron este año a la línea 12 del metro gracias a las gestiones del Secretario de Comunicaciones y Transportes, aquí presente. ¡Gracias, Dionisio!” le dijo a Dionisio Pérez-Jácome.
5.- Comentó que lo que se había logrado no había sido sólo por él: tuvo un gran equipo de apoyo a lo largo de los años, y, sobre todo, “se logró gracias a la paciencia, empuje y exigencia de los habitantes de la capital”. Lo cual es cierto: todos los que hemos padecido el aumento de tráfico por el mayor programa de obras viales de los últimos cuarenta años nos tuvimos que armar de paciencia para soportarlo… aunque pronto terminarán. Y lo que se hizo es apenas el 20% de lo que se necesita actualmente, dejen ustedes lo que hace falta para seguir creciendo.
Quiero destacar que no fue un informe de “logros personales”, sino que, en algo realmente atípico, el funcionario reconoce que se logró con el aporte de la sociedad. Y como bien dijo el coordinador de la bancada opositora panista, Federico Döring: “hay que reconocerle que es el primer Jefe de Gobierno que concluye su gobierno, completo, y no se va a buscar otro cargo”. En fin, que en el balance, la gestión de Marcelo Ebrard termina positiva. No en balde el candidato a sucederlo logró más del 70% de los votos ante uno de los electorados más informados, críticos y propositivos del país: el de la Ciudad de México. Bien por los logros, a continuar las tareas pendientes.