A principios del siglo XX la Iglesia en México, consideró que el movimiento social era una amenaza alentada por los movimientos socialistas que se venÃan dando, por lo que comenzó a esbozar un programa propio de acción social.
Para 1903 se concibió un plan de creación de cooperativas, al año siguiente los lÃderes católicos eran todavÃa más conscientes del problema obrero, al que se consideraba una cuestión moral y religiosa cuya solución estaba únicamente en la Iglesia. Para entonces fueron creados los CÃrculos Obreros Católicos que eran grupos mutualistas y cooperativos de obreros que se reunÃan regularmente con los párrocos, el objetivo era educar al obrero a preservar la moral. Para 1904 ya existÃan éstos cÃrculos en una gran parte del territorio nacional.
En 1910 se formo la Confederación de CÃrculos Obreros Católicos que no aporto mucho beneficio real a las clases obreras, y viendo que carecÃan de presencia en varios ámbitos sindicales, decidieron formar en 1911 el Partido Católico Nacional, el cual sin embrago, dio muestra de ser totalmente inadecuado para detener el movimiento obrero llegándose a declarar â??pecado mortalâ? la afiliación a los sindicatos.
El CÃrculo de Obreros Católicos al ver que no podÃan impedir que los obreros se afiliaran a los diversos sindicatos que empezaban a surgir, decidieron entonces enfrentar a los sindicatos con la creación de otro sindicato. Asà en 1921 la iglesia comenzó la creación de su propio movimiento obrero. Primero formo la Acción Social Católica y para abril de 1922 se creó la Confederación Nacional Católica del Trabajo, cuyas bases fundamentales eran: respeto a la religión, al paÃs y la propiedad. El cura Alfredo Méndez Medina fue su primer secretario general.
El gobierno y los sindicatos obreros fuera de la iglesia, aunaron fuerzas para impedir que los obreros se incorporaran a los sindicatos católicos. Para el 2 de julio de 1926 bajo el gobierno de Calles se exigió el registro del clero y de las iglesias, ante el gobierno. El conflicto entre Iglesia y Estado continuó tensándose, por lo que el dÃa que Estado asume el control de la iglesÃa, se efectuó una gigantesca manifestación en la ciudad de México y en otros centros importantes de todo el paÃs acompañadas de gritos de â??Abajo la Iglesiaâ? y â??Muerte a los curasâ?