Algo que no mucha gente conoce es que durante (y aún) la guerra contra el narcotrafico y el crimen organizado en México se ha vuelto un negocio muy jugoso para algunas empresas de Estados Unidos.
Claro, usted me dirá que para comenzar, las que venden armas y desde luego, balas, pero no solo para ellos, sino que también para otras; en menos de tres meses se conoció que México gastará poco más de 900 millones de dólares para comprar 23 helicópteros que destinará a labores de seguridad y combate a la delincuencia ejecutadas por la Secretaría de la Defensa, que encabeza el general Salvador Cienfuegos.
Obvio, esos helicópteros tienen ciertas características y desde luego, no cualquiera las hace, la ganadora en la batalla mexicana contra el crimen es la firma estadounidense Sikorsky Aircraft Corporation, que venderá a México 18 de sus populares helicópteros Blackhawk en unos 680 millones de dólares.
Nada mal ¿eh? mientras esto sucede, el Congreso de Estados Unidos analiza la aprobación a esta misma empresa para que pueda vender otros 5 helicópteros artillados al gobierno de México, también para operaciones de seguridad interna, cuyo costo alcanzaría los 225 millones de dólares.
Téngalo en cuenta, viene nuevo y mejor equipo en breve.