Rummer, la hija de Demi Moore y Bruce Willis, confesó que no le fue fácil asimilar la idea de tener a su amor platónico de la adolescencia, el actor Ashton Kutcher, viviendo en su propia casa como pareja de su madre.
Desde antes de que Kutcher viviera con Moore, de 2005 a 2011, Rummer tenía su habitación decorada con pósters del actor.
La primogénita de Moore y Willis, ahora de 26 años, reveló cómo cambió su vida con el anterior matrimonio de su madre, todo ello durante su visita al show de Howard Stern, pues estaba muy enamorada del actor y aquella etapa de su vida fue un tanto extraña.
La fascinación que Rummer sentía por Kutcher antes de que éste se convirtiera en el marido de su madre y en su padrastro no hizo sino aumentar.
La hija de la actriz aseguró no le fue fácil asimilar la idea de tener a su amor platónico, 15 años menor que su madre, viviendo en su propia casa; aunque se sintió “muy orgullosa” de la conquista de su progenitora.
“Definitivamente fue algo raro, pero debo felicitarlo porque fue realmente un buen padrastro”, advirtió Rummer.