El establishment republicano espera que, a fuerza de metidas de pata, el circo de Donald Trump esté llegando a su fin.
A pesar de las condenas generalizadas a los comentarios del magnate sobre los inmigrantes mexicanos y su cuestionamiento de la condición de héroe del senador John McCain, sin embargo, los partidarios de Trump están más entusiasmados que nunca. Y le va sorpresivamente bien en las encuestas luego de que nadie diese dos centavos por sus posibilidades de conseguir la nominación republicana a la presidencia.
“Me encanta que lo critiquen tanto porque eso lo ayuda”, declaró Frank Candelieri, de 89 años, al comentar las reacciones negativas a las declaraciones de Donald Trump.
Trump rechazó el sábado la noción de que McCain es un héroe porque pasó cinco años como prisionero de guerra en Vietnam, diciendo que prefería “la gente que no se dejaba capturar”. Como prisionero de guerra McCain fue torturado y se negó a ser liberado antes que sus compañeros.
Los comentarios de Donald Trump fueron ampliamente criticados y numerosas agrupaciones de veteranos de guerra y dirigentes republicanos salieron en defensa de McCain.
Las reacciones de los distintos sectores del Partido Republicano reflejan la discordia que reina en sus filas a medida que una enorme cantidad de aspirantes se lanzan a la campaña electoral. Ya hay 15 aspirantes y se espera que esta semana se sume un 16to.