Atacan asilo de ancianos en Yemen. Un grupo de hombres armados irrumpió el viernes a un asilo de ancianos administrado por una beneficencia fundada por la Madre Teresa, matando a 16 personas, entre ellas cuatro monjas católicas, informaron testigos y funcionarios.
La matanza inició cuando dos hombres armados rodearon el hogar para adultos mayores en Adén. Mientras tanto, otros cuatro entraron al edificio con el pretexto de que querían visitar a sus madres en el asilo, de acuerdo con la beneficencia, agentes de seguridad yemeníes y testigos. Los agentes hablaron bajo condición de anonimato porque no estaban autorizados a hablar con la prensa.
Agregaron que los hombres armados fueron revisando las habitaciones y esposando a las víctimas antes de asesinarlas a balazos en la cabeza. Una monja que sobrevivió y fue rescatada por los residentes dijo que se ocultó dentro de una nevera después que oyó a un guardia yemení gritar “¡Corran, corran!”
Khaled Haidar dijo a The Associated Press que contó 16 cadáveres, incluso el de su hermano Radwan. Todos habían sido esposados y baleados en la cabeza. Agregó que además de las cuatro monjas, fueron asesinados un cocinero yemení y varios guardias yemeníes.
Dijo que su familia fue la primera en llegar a la casa y que habló con la monja sobreviviente, que estaba llorando y en estado de conmoción. Haidar dijo que su familia la entregó a los combatientes sureños a cargo de la seguridad en el distrito local.
Sunita Kumar, vocera de las Misioneras de la Caridad en Calcuta, India, dijo que los miembros de la beneficencia estaban “totalmente impactados” por los asesinatos. “Las hermanas iban a regresar pero decidieron quedarse y ayudar a la gente” en Yemen, dijo. Agregó que dos monjas asesinadas eran de Ruanda y las otras dos eran de India y Kenia.
Había unos 80 residentes en el hogar. Las Misioneras también fueron atacadas en Yemen en 1998 cuando tres monjas fueron asesinadas en la ciudad portuaria de Hodeida.
Adén cayó en la anarquía después que una coalición encabezada por Arabia Saudí recapturó la ciudad de los rebeldes chiíes hutíes a mediados del año pasado.
La guerra civil en Yemen dividió el país en dos. La región del norte, en control de los rebeldes chiíes, ha sido atacada desde el aire por la coalición saudí. La región del sur, controlada por el gobierno reconocido internacionalmente y respaldado por los saudíes, se caracteriza por un vacío de poder y seguridad precaria.
El grupo extremista Estado Islámico y filiales de Al Qaeda han explotado la anarquía y han erigido bastiones en el sur. La guerra en Yemen ha dejado por lo menos 6.200 civiles muertos y decenas de miles de heridos y ha desplazado a casi dos millones y medio de personas.