Obama y Castro sostienen encuentro oficial en Palacio de la Revolución. El presidente estadunidense Barack Obama fue recibido hoy aquí con honores militares en el Palacio de la Revolución por su colega cubano Raúl Castro, para celebrar la que será la única reunión de trabajo durante su visita oficial de dos días.
Vistiendo un traje de color azul marino, corbata a rayas y con una amplia sonrisa, el mandatario estadunidense saludó al líder cubano, a quien, a través de un intérprete, ofreció sus impresiones sobre sus primeras horas en la isla tras su arribo la tarde del domingo.
“Tuvimos un excelente día ayer. Lo disfrutamos”, dijo Obama a Castro, recordando su caminata por La Habana Vieja acompañado de su esposa Michelle, sus hijas Sasha y Malia y algunos miembros de su delegación oficial.
Poco después, Castro dirigió a su invitado hacia el amplio salón protocolar donde una banda militar y la guardia de honor los esperaba para que el mandatario visitante pasara revista.
Antes, los dos se detuvieron por algunos minutos frente a la amplia puerta de acceso para escuchar los himnos nacionales de Cuba y de Estados Unidos interpretados por la banda, cuyas notas resonaron con fuerza en el espacioso recinto.
Poco después de pasar revista, Obama presentó a Castro a algunos de los miembros de su delegación, entre los que se incluyeron el secretario de Estado, John Kerry; el secretario de Agricultura; Tom Vilsack; y la asesora de Seguridad Nacional, Susan Rice.
Después de que Castro hizo lo propio, ambos pasaron a otra sala dominada por un verde follaje y amplios ventanales, tomaron asientos rodeados de sus asesores de seguridad a intérpretes, y esperaron a que los fotógrafos y camarógrafos fueran retirados para iniciar sus discusiones.
Aunque Estados Unidos deseaba una conferencia de prensa conjunta, negociada desde la semana pasada con el asesor adjunto de Seguridad Nacional, Ben Rhodes, ambos mandatarios entregarán declaraciones al final de su histórico encuentro.