Las esculturas de Fernando Botero lucen imponentes en el Prime Location de la isla de Hong Kong, donde día a día son apreciadas por centenares de asiáticos, desde el pasado 2 de junio, cuando se inauguró la exposición.
Gente de la calle, empresarios, políticos y diplomáticos de Asia han pasado en la primera semana por la emblemática plaza de la isla para ver las gigantes obras del artista latinoamericano.
El Central Harbourfront es un lugar por donde caminan y pasan miles de personas diariamente y desde donde se aprecia el Skyline de Hong Kong. Esta vez las esculturas del maestro forman parte de uno de los Skylines más importantes del mundo.
Las nueve esculturas monumentales, con más de tres metros de altura y con un peso mayor a dos toneladas son: Sphinx, Female Torso, Reclining Woman, Rape of Europe, Woman with Cigarrete, Lying Woman, Dressed Woman, Cat y Seated Woman.
Juan Montaña, director del Proyecto Botero en China, sostuvo a través de un comunicado difundido en Bogotá que esta exposición para el maestro Botero significa “haber puesto su huella en la capital del arte de Asia y en el centro financiero de Asia”.
“Significa haber cubierto las tres ciudades más importantes de China en sus museos y prestigiosos espacios con renombre internacional. Significa que sus esculturas se vayan de Asia para Europa de regreso habiendo tocado el corazón de millones de chinos y personas de todo el mundo que han visto su exposición en Oriente”, comentó.
Para Montaña, “Hong Kong era la mejor forma de cerrar este periplo de Botero en China, un sueño que comenzó en Beijing y ahora termina en Hong Kong” y agregó que “la exposición es cien por ciento cultural. Ninguna de las obras está disponible para la venta”.