La fecha en que Pokémon Go llegará de manera oficial a América Latina sigue en suspenso, pese a versiones de que en al menos tres países del área podría ser descargado de manera legal el último día de este julio.
La demora se debe a los bajos ingresos que los países latinoamericanos reportan en materia de juegos electrónicos, alrededor de cuatro por ciento del total mundial, pero que los que mayor ritmo de crecimiento muestran.
El sitio mmoserverstatus, que monitorea en tiempo real los servidores de los juegos electrónicos más populares, mantuvo hasta pasadas las 10:00 GMT de este miércoles la leyenda de que Brasil, Chile y Argentina serían los primeros en acceder al juego.
“Una fuente fiable nos ha comunicado la supuesta fecha del lanzamiento”, se leía en español en la página correspondiente a Pokémon Go, dato rescatado y difundido en primera instancia por el sitio ruso RT.
Sin embargo, hacia las 11:00 GMT la leyenda había desaparecido y los latinoamericanos solo encontraban que en el twitter correspondiente a la región del juego seguían los tuits señalando que “pronto” estará disponible en la zona.
“#PokemonGo Únete A la gran espera en Latinoamérica PRÓXIMAMENTE…” se leía en @PokemonGo_LAT, que especificaba: “Latinoamérica representa el 4% de ingresos en videojuegos. Por eso primero se lanzó #PokemonGo en otros lugares!!”.
En seguida se mostraba una gráfica según la cual el mercado global de este tipo de juegos suma 99 mil 600 millones de dólares (mdd) este año, crecimiento de 8.5 por ciento respecto a 2015.
La región con la mayor parte del mercado de juegos, 47 por ciento, es Asia Pacífico, con 46.600 mdd y crecimiento de 10.7 por ciento, seguida por el 25 por ciento de América del Norte que representa 25.4 mdd y aumento anual de 4.1 por ciento.
Un punto porcentual debajo se encuentran Europa, Medio Oriente y Africa que en conjunto significan 23.5 mdd y aumento anual de 7.3 por ciento.
Al final se encuentra América Latina con 4.1 mdd, cuatro por ciento del total del mercado global pero crecimiento anual de 20.1 por ciento, prácticamente el doble del asiático y el más alto de las cuatro regiones.