El estado de Colima registra la tasa de homicidios más alta del país, desde que inició el año.
De acuerdo con el Sistema Nacional de Seguridad Pública, en el estado se cometen 40.4 homicidios dolosos por cada cien mil habitantes, superando a estados como Guerrero, que tiene una tasa del 29.7 por ciento y a Michoacán, que reporta 11.6 por ciento por cada cien mil habitantes.
Estas cifras preocupan a las autoridades ya que Colima, es uno de los cinco estados más pequeños del país, con apenas 700 mil habitantes y es una de las entidades más violentas en México.
José Ignacio Peralta Sánchez, gobernador de Colima, dijo no estar “satisfecho con los resultados alcanzados hasta este momento en materia de Seguridad Pública”.
En Colima, durante el mes de enero se cometieron 30 homicidios:
– 41 en febrero,
– 55 en marzo,
– 73 en abril,
– 46 en mayo y
– en junio ocurrieron 42 asesinatos.
Según las autoridades, la mayoría de estos crímenes están relacionados con el narcotráfico.
El almirante Eduardo Villa Valenzuela, Secretario de Seguridad Pública en Colima, indicó que “definitivamente es una lucha interna entre cárteles, yo lo he manifestado es una guerra urbana en donde los homicidas están confundidos entre la sociedad”.
Incluso el número de homicidios en Colima pudiera ser mucho mayor ya que algunos cuerpos son enterrados en fosas clandestinas.
El procurador de Colima, Felipe de Jesús Muñoz Vázquez informó que han localizado 19 cuerpos en fosas clandestina, de las cuales “llevamos seis, siete personas identificadas”, indicó.
Agregó que “los probables responsables en varias de estas ejecuciones ya se encuentran vinculados a procesos”.
Ante los altos índices de violencia, los estados de Jalisco y Michoacán blindaron sus límites territoriales con Colima.
En tanto, el Ejército Mexicano reforzó la vigilancia y montó retenes militares, para evitar el tráfico de cualquier tipo de enervantes y la portación indebida de armas de fuego.
Además de los homicidios, Colima también ocupa el primer lugar a nivel nacional con más casos de robo a casa habitación y uno de los 10 estados con la tasa más alta de secuestros.