Los recursos para evitar una posible extradición parecen agotarse para la defensa de Joaquín, el Chapo Guzmán, que como última medida interpuso un recurso de revisión para que el capo no sea llevado ante un juez estadunidense, pues “existe la posibilidad que en estados como Texas, donde existe la pena de muerte, el narcotraficante sea sentenciado a la pena máxima”.
Puede ocurrir, pues aunque existen acuerdos bilaterales en el tratado de extradición entre México y Estados Unidos, no hay una garantía de que un magistrado le otorgue la pena máxima, pues finalmente esos acuerdos los firmó la embajada de ese país y no el Departamento de Justicia”, enfatizó en entrevista telefónica con Ríodoce José Refugio Rodríguez Núñez, abogado del capo.
No obstante, se le observó a la defensa, no existe ningún antecedente de otro capo mexicano extraditado que haya sido sentenciado a la pena máxima, Rodríguez dijo que ello no garantiza que no pueda ocurrir, pues es sabido por todos que la justicia estadunidense siempre ha intentado cazar a Guzmán Loera y castigarlo con todo el peso de la ley.
Voceros del Departamento de Justicia de Estados Unidos (USDOJ) dijeron en un comunicado que ellos no violarían los acuerdos entre ambos países, aunque reconocieron que por los cargos que enfrenta el capo, éste sí pudiera alcanzar cadena perpetua.
“Claro que ellos no van a reconocer de lo que son capaces de hacer, pero no podemos ignorar que es una posibilidad y mi trabajo es proteger a mi cliente”, dijo Rodríguez Núñez.
De acuerdo con los tratados de extradición firmados en 2002 por los gobiernos de México y Estados Unidos, y revisados por este rotativo, se establece en el primer párrafo del artículo 8 del documento que cuando los delitos porque se extradita a un individuo, sean motivos de ser sentenciado a pena de muerte, el gobierno mexicano puede rehusarse a la extradición, o bien exigir al gobierno estadunidense que no lo castigue con la pena máxima.
La única corte de distrito que requiere al capo, y en cuyo estado se permite la pena de muerte, está en Texas, un sitio donde el capo es acusado de homicidio calificado, asociación delictuosa, narcotráfico, lavado de dinero y posesión de armas.
Según lo estipula el código penal federal de Texas, esos delitos son suficientes para que el capo sea sentenciado a la pena de muerte, y el fiscal Robert Pittman, quien tiene años juntando pruebas contra el capo, es conocido por ser de los más feroces del sistema judicial de Texas.
Sin embargo, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) ha enfatizado en repetidas ocasiones que a ellos ya les notificó el gobierno estadunidense que otorgarían las garantías suficientes para que no se aplique la pena de muerte al Chapo.
“Esta información ya se le notificó al señor Guzmán Loera desde el pasado 7 de mayo, pues la corte del Distrito del Oeste de Texas es quien lo está requiriendo, y la entidad que se está comprometiendo a no procesarlo por la pena máxima”, dijo la SER, en un comunicado.