Muy aireado se escucha al gobernador de Tabasco, Adán Augusto López, en una conversación que sostiene con la secretaria de Salud, Silvia Roldán Fernández: “Se lo dije al Presidente, yo ya no puedo con Gatell, tiene unas cifras que no sé de dónde saca”.
Esta plática se dio durante la visita de supervisión que realizó el mandatario por la Unidad de Hospitalización Temprana de Tabasco, la cual atenderá a pacientes con covid-19 que ya se encuentran en proceso de recuperación.
En el diálogo, Roldán Fernández señala que el problema es la información que pasan a nivel central.
A ver, señor gobernador, no necesita lidiar con el subsecretario de Salud; él no es mago ni salva vidas con sólo desearlo. Su misión, mandatario, es luchar contra el virus.
¿O no puede?
Esta es muestra de que en el Gobierno Federal no pueden con el coronavirus y en los gobiernos estatales no pueden con los recortes que dan en el gobierno federal, así que es un círculo vicioso donde en especial, los gobiernos de Morena (Tabasco, Morelos, Veracruz, Ciudad de México, etc.) no pueden ponerse de acuerdo en cómo trabajar en beneficio de la gente.