Recuerdan ustedes las ruinosas apuestas, desbocadas y sin control que llevaron a la Comercial Mexicana a casi la quiebra que tiene, ¿verdad?
Si el jugar en el mercado de derivados no es tan fácil pero puede ser sencillamente terrible si vemos que no se hace con cuidado, sino vean lo que acaba de ocurrir en Alemania.
Adolf Merckle un exitoso hombre de negocios de 74 años se tiro delante del paso del ferrocarril en Alemania, la razón una muy sencilla, estaría en poco tiempo en banca rota.
Sucede que jugo en el mercado de derivados así como la comercial mexicana, pero jugo apostando que las muestras de interés y coqueteo de Porche por comprar Volks Waggen, tararían el precio de la acción de VW, ganando el.
Sorpresa, perdió su apuesta, lo que le dejaba con una deuda de unos 6400 millones de dólares, lo que bueno, equivaldría al 45 por ciento de toda su fortuna, así que bueno, podría hacer frente a su deuda pero los bancos mundiales si bien deseaban ayudarle en los tiempos actuales seria complicado, así que negociaciones largas y tortuosas le llevaron por el camino de la depresión poniendo fin a su existencia de 74 años de la forma en que les relato, tirándose al paso del ferrocarril, habiendo dejado una carta póstuma para su familia y siendo ya corroborado por la policía.
¿Triste?
Si, digo, el mercado de derivados sabiéndole manejar puede ser una maravilla, vean a México, tiene contratado un seguro que costo 1500 millones de dólares garantizando ingresos petroleros por 9000 millones de dólares si el precio por barril de petróleo, queda en promedio abajo de 70 dólares este 2009.
Pero pocos son los que saben, como usarle al mercado de derivados, ¿se nota?