La evolución de la pandemia de gripe A continúa impredecible, pues podría convertirse en un tipo de infección leve o, por el contrario, devenir más peligrosa, afirmó hoy el director adjunto de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Keiji Fukuda.
Ante los casos -todavía aislados- de mutación del virus AH1N1 que se han registrado, Fukuda explicó que por ahora es imposible pronosticar que puede ocurrir.
Precisó que en caso de mutación “el virus puede ser menos virulento, pero también hay ejemplos de virus que comenzaron siendo leves y luego se volvieron más patógenos. Tenemos los dos tipos de ejemplos”.
El representante de la OMS dijo que los países deben continuar cooperando para luchar contra la actual pandemia.
Reveló que, por el momento, el organismo no tiene planes para levantar o disminuir el nivel máximo de alerta sanitaria que rige desde el pasado junio en relación a la gripe A.
Fukuda precisó que la transmisión del virus es alta en el hemisferio norte, aunque la situación difiere según el país, mientras que en el hemisferio sur el número de casos continúa a la baja.
En términos de la campaña de vacunación, indicó que se han distribuido 150 millones de dosis en unos 40 países, sin que se hayan presentado reacciones adversas inesperadas entre las personas inmunizadas.
Sobre el porcentaje de personas afectadas por esta infección, el experto declaró que esto depende de diferentes factores, como la edad.
En ese último caso, los niños se presentan como un grupo especialmente vulnerable, principalmente cuando se encuentran agrupados en entornos como escuelas o guarderías, con tasas que pueden alcanzar el 30 por ciento, si se toma como referencia la gripe estacional, declaró.
Preguntado sobre los casos de resistencia al antiviral Oseltamivir, Fukuda confirmó que se han verificado 96 casos en el mundo, pero sostuvo que este medicamento sigue siendo efectivo contra la mayor parte de tipos de virus que se han detectado en esta pandemia