Docenas de alcaldes respetuosos con el medio ambiente de todo el mundo exigieron el martes que sus líderes nacionales tomen medidas decisivas en las próximas conversaciones de París, al decir que podría ser la última oportunidad para mantener el calentamiento global a niveles seguros para la humanidad.
Unos 60 alcaldes seleccionados por apoyar el mensaje ambiental del papa Francisco se reunieron el martes en el Vaticano para una conferencia de dos días con el objetivo de mantener la presión sobre los líderes mundiales en las negociaciones previas a la cumbre de París de diciembre.
Se espera que los alcaldes firmen una declaración el martes que afirme que “el cambio climático ambiental inducido por el hombre es una realidad científica y su control efectivo es un imperativo moral para la humanidad”, de acuerdo a la declaración final vista por The Associated Press.
El clímax de la sesión inaugural del martes fue una audiencia por la tarde con el papa Francisco, que se ha convertido en un héroe del movimiento ambiental y ha utilizado su autoridad moral y enorme popularidad para darle atención mundial al cambio climático y sus efectos en los pobres.
La otra gran prioridad de Francisco ha sido crear conciencia sobre el tráfico humano. La conferencia del Vaticano tiene el objetivo de mostrar cómo se relacionan ambas: la explotación de la Tierra y su gente más vulnerable, con el calentamiento global con frecuencia siendo responsable de crear “refugiados ambientales” forzados a huir de sus viviendas por desastres naturales causados por el cambio climático.
El texto final pide incentivos financieros para la transición a energías con menos emisiones de dióxido de carbono y renovables y un cambio en la financiación pública, retirando incentivos al ejército para “inversiones urgentes “en desarrollo sostenible, con los países más ricos ayudando a aquellos con menos recursos.
Los líderes políticos, según el documento, tienen una “responsabilidad especial” en las conversaciones de París para aprobar un “acuerdo para el clima valiente que restrinja el calentamiento global a un nivel seguro para la humanidad, mientras protege a los pobres y vulnerables del actual cambio climático que amenaza gravemente sus vidas”.
En uno de los discursos de apertura de la sesión, el gobernador de California, Jerry Brown, criticó a los escépticos del calentamiento global, que “engatusan” al público y a los políticos con información falsa para convencerles de que el planeta no se está calentando.
Brown, un ex seminarista jesuita, instó a los alcaldes a no ser complacientes con los escépticos del cambio climático. “Tenemos una oposición muy poderosa que, al menos en mi país, gasta miles de millones para intentar mantener alejadas de cargos públicos a personas como ustedes, y elegir a trogloditas y otros escépticos de la ciencia obvia”, indicó.
Expertos sostienen desde hace tiempo que las ciudades son clave para reducir el calentamiento global ya que las áreas urbanas suponen casi tres cuartos de las emisiones generadas por humanos.
La conferencia abrió con dos emotivos testimonios de mujeres mexicanas que fueron traficadas para prostitución y labor forzada.
“Somos seres humanos”, dijo Ana Laura Pérez Jaimes, quien contó sobre las 600 cicatrices en su cuerpo que obtuvo al ser forzada a trabajar como esclava.