El ministro alemán de Relaciones Exteriores Guido Westerwelle explicó el martes que su país teme que la adopción de un mecanismo de apoyo a Grecia debilite los esfuerzos para enderezar las finanzas de ese país.
“Como europeos, está muy claro (…) que nosotros apoyamos la solidaridad europea”, declaró el ministro a la radio pública Deutschlandfunk. Sin embargo, “nosotros somos muy reticentes” a la elaboración rápida de un mecanismo de apoyo “eventual” a Grecia.
“Temo que más bien se debiliten los esfuerzos de realizar reformas del primer ministro George Papandreou en Grecia si se le pone dinero en la vitrina, pues la necesidad de las reformas no sería considerada como tan evidente”, explicó.
Westerwelle reiteró que la posición de Alemania es que una ayuda financiera a Grecia no es necesaria por el momento.
“Todos hablan de un efecto dominó si no adoptamos inmediatamente un programa de ayuda. Pero piensen en el efecto dominó si adoptásemos uno”, continuó el ministro, aludiendo aparentemente a los otros países que sufren dificultades presupuestarias y que podrían pedir ayuda a la Unión Europea (UE).
“Nosotros no ayudamos a nadie en Europa si un país fuerte como Alemania es debilitado” por la adopción de programas de ayuda para los países que sufren crisis de pagos, añadió.
Grecia pide que los 27 jefes de Estado y de gobierno de la UE aprueben durante su cumbre del jueves y el viernes en Bruselas la instauración de un plan de ayuda financiera, que utilizaría si fuese necesario.
Los países europeos tienen opiniones divergentes sobre la urgencia de adoptar un plan de ayuda a Grecia