La presidenta Cristina Fernández dijo el viernes que Argentina no volverá a utilizar la fuerza militar para recuperar las islas Malvinas, al cumplirse 28 años del inicio de una cruenta guerra con Gran Bretaña por la posesión del archipiélago.
“No nos vengan a correr con fantasmas de que los argentinos tratamos de tomar militarmente las islas”, dijo la mandataria en un acto en la ciudad sureña de Ushuaia en conmemoración del Día del Veterano de Guerra y los Caídos en las Malvinas.
“Esta presidenta” y “esta sociedad no pueden ser vistas por el mundo como una amenaza”, subrayó. Calificó de “ridículas” versiones que no especificó en el sentido de que Argentina podría volver a utilizar la fuerza para recuperar el archipiélago.
El conflicto comenzó con el desembarco de tropas argentinas el 2 de abril de 1982 y terminó con la rendición del gobierno de Buenos Aires el 14 de junio. Durante los combates murieron 649 argentinos y 272 británicos.
“Pretender soberanía a 14.000 kilómetros de distancia no es sostenible por el derecho, la geografía ni por el sentido común”, agregó la mandataria al recordar la lejanía de Gran Bretaña sobre el archipiélago, que ocupó Gran Bretaña por la fuerza en 1833 y que Argentina dice haberlo heredado de la corona española.
“No es (el del Reino Unido) un ejercicio de soberanía, es un ejercicio de colonialismo”, destacó Fernández en su discurso a la vera del canal de Beagle, en Ushuaia, capital de Tierra del Fuego, a unos 3.200 kilómetros de la capital argentina y a menos de 1.000 kilómetros en línea recta de las Malvinas.
Recordó que desde 1965 la Asamblea General de las Naciones Unidas, a través de su Comité de descolonización, viene reiterando anualmente su pedido para que los gobiernos de Londres y Buenos Aires se sienten a negociar sobre el tema.
A nivel diplomático, las relaciones se acaban de tensar tras una escalada del Reino Unido por exploraciones hidrocarburíferas que de manera unilateral iniciaron británicos e isleños en la zona.
Fernández agradeció la solidaridad de “nuestros hermanos latinoamericanos sin excepción”, que apoyaron en recientes foros los reclamos argentinos.
En este contexto, el 24 de febrero último, el canciller Jorge Taiana llevó su reclamo a las Naciones Unidas y el 20 de marzo a la Organización de Estados Americanos.
En ambos casos, Argentina pidió que el Reino Unido acepte su obligación de no innovar en el área de disputa, tal como lo establece una resolución de la Asamblea General de la ONU.
Organizaciones políticas y sociales tenían previsto para este viernes marchas en la capital argentina hacia la embajada del Reino Unido de Gran Bretaña, en repudio a la ocupación británica en las islas Malvinas, a las que los británicos llaman Falkland.