El hombre que fue abatido el jueves tras intentar atacar una comisaría en París vivió “en un hogar para refugiados” en el oeste de Alemania, que fue allanado este sábado, indicó la policía judicial alemana.
No se encontró “ningún indicio de otros posibles ataques” durante el registro realizado en este centro ubicado en la ciudad alemana de Recklinghausen, en Renania del Norte-Westfalia (oeste), precisó en un comunicado la policía alemana.
La policía no indicó si el hombre que intentó atacar hace dos días una comisaría en París, al grito de Alá Akbar (Alá es el más grande), solicitó asilo en Alemania, pero una fuente dijo a la AFP que sí lo hizo.
El pasado jueves, día del primer aniversario de los atentados contra la revista Charlie Hebdo, este hombre se presentó en una comisaría de un barrio popular del norte de París, con un cuchillo en mano y un cinturón de explosivos, que luego se supo era falso.
El hombre, que no respondió a las ordenes de la policía de detenerse, fue abatido.
En un papel escrito en árabe, el hombre declaraba su lealtad a Abú Bakr al Bagdadi, el jefe del grupo yihadista Estado Islámico (EI) y explicaba su acto como una venganza por los “ataques a Siria”.
También se encontró en uno de sus bolsillos un chip alemán para teléfono móvil.