En el caso de los normalistas desaparecidos de Ayotzinapa Guerrero, solo queda que un milagro permita mantener la vela encendida de la esparanza en torno a su paradero, que cualquier noche de estas alguien toque a la puerta de los familiares de los 43 desaparecidos y al abrir diga “papa, volvi”, aunque cada vez la luz de esa posibilidad se ve más lejana, dificil y complicada.
El que la búsqueda de los 43 normalistas de Ayotzinapa Guerrero continúe, ahora depende enteramente de la ciencia, ya que aún cuando las autoridades han bajado la intensidad de la busqueda ya que les parece muy solida la declaración de los integrante sde guerreros unidos, hayan detenido al ex alcalde de Iguala y se hayan encontrado restos de personas quemadas, son los forenses internacionales quienes tienen la última palabra.
Y que quede claro, que hasta no tener datos comprobados, los padres de los estudiantes de Ayotzinapa Guerrero, mantienen el anhelo de encontrarlos y asisten y continuan en movilizaciones, declaraciones, mitines, etc para que no se olvide el tema, aun cuando ya cada día que pasa menos reflectores tienen.
Luis Fondebrider, titular del Equipo Argentino de Antropología Forense, que trabaja en el caso, considera que los investigadores cuentan con la libertad necesaria para hacer su trabajo en torno al tema de Ayotzinapa Guerrero, alguna vez se habló de que los peritos argentinos, no tenian condiciones minimas de seguridad, pero inmediatamente fue desmentido y hoy de nuevaa cuenta se vuelve a hacer.
El Equipo Argentino de Antropología Forense, cobró popularidad por haber hallado e identificado en 1997 los restos del guerrillero argentino-cubano Ernesto Che Guevara, en Bolivia.
En ellos recae toda la confianza sobre el tema de Ayotzinapa Guerrero.
Es la desconfianza en nuestros especialistas, en nuestras instituciones, en nuestros peritos… la que ha obligado a que peritos internacionales aboguen por la verdad. Así nuestro México.