Tras admitir reveses militares, el presidente estadounidense Barack Obama reconoció el lunes que Estados Unidos todavía carece de una “estrategia completa” para entrenar las fuerzas iraquíes a fin de que enfrenten al grupo Estado Islámico. Instó al gobierno de Irak a permitir más suníes iraquíes a sumarse a la campaña contra los extremistas.
Casi un año después que las fuerzas estadounidenses empezaron a regresar a Irak para asistir a las fuerzas locales, Barack Obama dijo que el Estado Islámico sigue “ágil, agresivo y oportunista”. Celebró “progresos significativos” en áreas en que Estados Unidos entrenó a los iraquíes para combatir pero dijo que, sin la asistencia estadounidense, suelen estar pobremente equipados y tienen una moral baja.
Los combatientes de Estado Islámico capturaron el mes pasado Ramadi, la capital de la provincia de Anbar, y el secretario de defensa estadounidense lamentó que las fuerzas iraquíes carecieran de “voluntad de lucha”. Fue una evaluación notablemente negativa de un aparato militar que ha recibido miles de millones de dólares en asistencia desde que comenzó la guerra durante la presidencia de George. W. Bush en 2003.
De todos modos, el presidente indicó que el mero hecho de aumentar el número de estadounidenses en Irak no resolvería la situación. Estados Unidos tiene allí unos 3.000 efectivos para misiones de instrucción y asistencia. “Tenemos más capacidad de entrenamiento que reclutas”, dijo al final de una reunión de dos días del G7 en un hotel en los Alpes bávaros.
Los líderes del G7 invitaron al primer ministro iraquí Haider al-Abadi a acompañarlos el lunes para conversar sobre la situación de seguridad en el Oriente Medio. Obama y Abadi se reunieron también entre sí antes de que Obama regresara a Washington.
Tanto en público como en privado, Obama instó a Abadi y su gobierno de mayoría chií que permitiera más suníes para combatir al Estado Islámico. Washington ha culpado desde hace tiempo a las divisiones sectarias de Irak por provocar el tipo de inestabilidad que permitió medrar a los extremistas. “Hemos visto tribus suníes que no solo están dispuestas y preparadas a combatir al Estado Islámico, sino que han sido exitosas en provocar bajas al Estado Islámico”, afirmó Barack Obama.