Más de 20 políticos y periodistas secuestrados en el sur de Filipinas fueron encontrados muertos este lunes.
El grupo fue atacado en la isla de Mindanao por hombres armados cuando intentaban presentar los papeles de la nominación de uno de los candidatos para las elecciones locales del año que viene.
En esa oportunidad capturaron a más personas que permanecen desaparecidas, pero ahora se teme por sus vidas.
Las elecciones en Filipinas suelen estar marcadas por la violencia, particularmente en el sur donde los comicios hacen que aumenten los roces entre grupos insurgentes y clanes locales.
Si bien las elecciones generales se celebran en mayo de 2010, el registro de candidatos para los puestos locales y nacionales se abrió a principios de este mes.
Los corresponsales de diversos medios en Manila, Danny Vincent, informó que las autoridades están investigando los indicios que relacionan las muertes con las rivalidades entre familias de la provincia
Jesus Dureza, consejero de la presidenta Gloria Arroyo en la región volátil de Mindanao, dijo que el descubrimiento de los cuerpos se trata de una “horrenda masacre de civiles sin precedentes en la historia reciente”.
Dureza recomendó que se impusiera estado de emergencia en toda la región.
Por su parte Arroyo condenó la violencia en un comunicado oficial. También advirtió que se harán todos los esfuerzos para encontrar a los responsables.
“La sociedad civilizada no tienen espacio para este tipo de violencia”, apuntó la mandataria