El fabricante estadounidense de aviones Boeing anunció este miércoles unas previsiones decepcionantes para 2016, pese a un desempeño mejor de lo previsto en 2015, provocando una caída de sus acciones del 4% en las operaciones electrónicas previas a la apertura de Wall Street.
El grupo aeronáutico estadounidense prevé un beneficio ajustado por la caída de la acción, entre los 8,15 y 8,35 dólares, contra los 9,43 dólares esperados en promedio por los analistas. El volumen de negocios debería situarse entre los 93.000 y 95.000 millones de dólares contra los 96.090 millones anticipados por los mercados.
En 2015, el grupo superó las previsiones, pese a un descenso del 5% de su beneficio neto, a 5.200 millones de dólares.
Boeing anunció que prevé entregar en 2016 entre 740 y 745 aparatos, contra los 762 el año pasado. Su gran rival, el europeo Airbus planea por su parte entregar 650 aparatos en 2016.
Las entregas son el barómetro más seguido por los expertos, porque las aerolíneas pagan tradicionalmente cuando toman posesión del aparato. Este indicador ha ganado mucha importancia en los últimos meses porque tanto Boeing como Airbus disponen de largas listas de órdenes de compra, suscitando dudas sobre sus respectivas capacidades para respetar sus calendarios.
Aunque reafirmó este miércoles su cadencia de producción para los próximos años, Boeing no indicó si planea rivalizar con Airbus en el sector de los aviones monopasillo.