La perredista Clara Brugada dejó en manos del jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, y de la Asamblea Legislativa capitalina la resolución del conflicto que se vive en la delegación Iztapalapa.
Al iniciar este domingo su segundo día de resistencia civil en la Macroplaza Cuitláhuac, ubicada a un constado de la explanada delegacional, Brugada Molina comentó que se reunió con Ebrard y le planteó que Iztapalapa no puede quedarse inmovilizada y tampoco puede seguir en esta crisis política y con ingobernabilidad.
A unas horas de que Rafael Acosta, ‘Juanito’, informara su intención de asumir el lunes la jefatura delegacional, Brugada expuso ante sus seguidores: “Aquí no se rinde nadie. No vamos a abandonar la lucha porque Iztapalapa necesita un proyecto democratizador”