La oposición en las juntas de Coordinación PolÃtica del Senado y la Cámara de Diputados explora unir fuerzas para aplicar su mayorÃa al PAN y llevar a Felipe Calderón al Congreso. Incluso la Mesa Directiva de los senadores, encabezada por Carlos Navarrete, analiza los fundamentos legales que permitan invitar al Presidente a dialogar.
Los panistas Gustavo Madero y Josefina Vázquez Mota insisten en que esta maniobra sólo busca engañar a la población con la idea de que el Ejecutivo se negó a dialogar con el Legislativo.
Manlio Fabio Beltrones, coordinador de los senadores del PRI, exigió que Calderón acuda a dialogar al Congreso, y recordó que en México existe una democracia, no una monarquÃa.
Mediante su tradicional comunicado dominical, Beltrones destacó que “la sede del Congreso serÃa un espacio institucional indicado para un intercambio de ideas con el Ejecutivo en un ambiente en el que imperen el respeto, la civilidad y la responsabilidad, ya que la situación de México asà lo exige y eso esperan los ciudadanos.
“No se trata de reeditar el DÃa del Presidente, sino de encontrar los mecanismos que permitan intensificar el diálogo institucional que sostienen ambos poderes mediante la discusión y aprobación de iniciativas de Ley. Ã?sta no es una monarquÃa, sino una democracia en la que el Ejecutivo rinde cuentas al Legislativo y no al revés.”
A propuesta del propio Beltrones y de Arturo Escobar, coordinador de los legisladores del PVEM, el martes 17 de agosto la Junta de Coordinación PolÃtica del Senado trató el tema de manera escueta. Gustavo Madero les habÃa informado que el presidente Felipe Calderón los invitaba a todos a dialogar el jueves 19 en el casino del Campo Marte como parte del Diálogo por la Seguridad.
De acuerdo con la información proporcionada por integrantes de la Junta, Beltrones planteó que si el Presidente de la República en verdad querÃa un diálogo fructÃfero con el Poder Legislativo debÃa acudir al Congreso de la Unión el 1 de Septiembre, fecha del Informe de Gobierno, o quizás unos dÃas después, pero que mostrara su voluntad polÃtica de acudir al diálogo abierto y de compromisos.
Su postura fue respaldada por Arturo Escobar, quien recordó que cuando fue diputado federal, Felipe Calderón era de los panistas que exigÃa el diálogo entre los legisladores federales y el Presidente.
Fue por eso que no se firmó el acuerdo para el formato del Informe, que fue presentado ese dÃa y sin incluir la presencia de Calderón.
Pero Gustavo Madero les recordó a sus compañeros que no existe fundamento legal para pedir que el mandatario federal acuda a entregar personalmente su Informe escrito, mucho menos para entablar un diálogo público similar al que los legisladores federales sostienen en materia de comparecencias.
Carlos Navarrete, del PRD y presidente de la Mesa, planteó que se puede explorar el fundamento jurÃdico para esa reunión, pero coincidió con Beltrones en que un acuerdo de la Junta y la voluntad del Presidente pueden concretar ese encuentro. No se llegó a un acuerdo porque el punto no se sometió a votación.
En la Cámara de Diputados, el presidente de la Junta, Francisco Rojas, trabaja en los consensos con la oposición para lograr ese acuerdo parlamentario que, junto con el Senado, puede permitir la presencia de Calderón en el Legislativo