Tras analizar 100 mil años de registros geológicos, se ha calculado que el tiempo entre erupciones volcánicas capaces de alterar el mundo es menor de lo pensado, un máximo de 17 mil años.
Los volcanes, como los asteroides, pueden ser lo suficientemente poderosos como para ser destructivos a escala global. De hecho, una evaluación reciente los describió como capaces de devolver a la humanidad a un estado anterior a la civilización.
Según los registros geológicos, las dos súper erupciones más recientes se produjeron hace entre 20 mil y 30 mil años. El profesor Rougier agrega que en general, el ser humano ha sido “ligeramente afortunado” de no haber experimentado ninguna súper erupción desde entonces. “Pero es importante apreciar que la ausencia de súper erupciones en los últimos 20.000 años no implica que haya una fecha de vencimiento. La naturaleza no es tan regular”, advierte.