Beatriz González Rubín
“Porque es un hombre que se apiada de todas las criaturas vivientes, es llamado ‘Santo’.” Dharmapada.
Es imposible dejar de hablar esta semana de la muerte de varias personas a “manos” de perros rabiosos en Iztapalapa. Según investigadores de la UNAM en la Zona Metropolitana hay cerca de tres millones de perros abandonados que deambulan por las calles y lugares de la ciudad y que se alimentan en tiraderos de basura o por la comida que les da la gente.
Los hechos ocurrieron en el Cerro de la Estrella, donde se presume que 4 personas fallecieron a causa de la mordedura de perros. Tristemente esta no es la primera vez que se reporta una situación así.
Es importante considerar que la zona (El Cerro de la Estrella) no solo es el refugio de perros abandonados, sino que también existen muchos jóvenes que utilizan el lugar para consumo de drogas y alcohol; de igual manera se han encontrado restos de ritos supuestamente satánicos o esotéricos, fetiches y demás artículos.
La Brigada de Vigilancia Animal de la SSP-DF dio inicio a la cacería y “arrestaron” a 25 perros encontrados en la zona de la reserva ecológica. Durante la semana fueron capturados 29 canes y para el viernes once, en el centro de control canino había un total de 57 animales, 34 adultos: 19 hembras y 15 machos, y 23 cachorros: 9 hembras 14 machos.
25 perros fueron revisados, se hicieron análisis a las uñas, boca y pelo de los canes que no arrojaron la presencia de restos o sangre humana, el equipo de CSI Vegas podría sentir vergüenza de los expertos mexicanos. Al no encontrar evidencia los detenidos fueron puestos en libertad y se determinó que ninguno de los 25 perros participó en los “crímenes”.
Todo lo anterior podría ser el argumento de una película donde “La banda de los Doberman” de 1972 se quedaría corta. No me queda más que decir que sólo en México.
Toda esta situación nos hace quedar cada vez más en vergüenza con el mundo. No sólo somos un país donde la pobreza crece por minutos, sino además, somos irresponsables con los animales.
Es muy fácil comprar un animal en miles de pesos, y si, miles, en las cadenas importantes que trafican con los perros y demás criaturas, para después hartarse del cachorro por la falta de compromiso y tiempo, para finalmente abandonarlo en la calle.
Pero ¿qué se puede esperar de una sociedad que no educa a los niños? Hay muchos padres que ceden ante los caprichos de los pequeños cuando quieren una mascota y la compran, sin ser conscientes de las necesidades de los animales.
Finalmente se logro que la Asamblea Legislativa aprobara la Ley de Protección a los Animales del Distrito Federal, mucho se tardaron ya que cada vez estamos peor, ahora resulta que los criminales son los perros y no los “desgraciados” que los abandonan y los torturan. Esterilizar es una de las grandes soluciones para evitar el crecimiento desmedido de los perros callejeros, otra medida importante es la adopción. Hay cientos de albergues que recogen cachorros y los dan en adopción, es momento que cambiemos y dejemos de buscar perros de raza, que no niego, son preciosos, pero hay miles que necesitan ser adoptados y que garantizan amor y agradecimiento.
Una sociedad que no cuida y protege a los más indefensos, está perdida.