Capitalinos realizan sus actividades normales pese a contingencia. Todos los días, don José Ramírez, a sus 62 años, sale a correr haya frío o calor, o como en esta ocasión, una declaratoria de Fase 1 de Contingencia Ambiental, donde se supone que no debería de ejercitarse al aire libre.
Son las 6:30 de la mañana y aunque se le informa que hay contingencia, mencionó que él no estaba enterando; además, destaca, “los mexicanos aguantamos eso y más”.
Mientras platicamos, otros corredores acompañados por sus perros, recorren el deportivo Francisco José Mújica de la CTM Culhuacán, sin prestar mayor relevancia a la contingencia ambiental.
Don José comenta: de algo nos vamos a morir, aunque de inmediato aclaró que el ejercicio nos hace más fuerte para resistir los efectos de la contaminación.
Rubén llegó puntual a su trabajo manejando su automóvil y de inmediato, responde que estuvo “muy alivianado” el tránsito, no se encontró los nudos que se hacen normalmente en Mosqueta y Reforma ni tuvo muchos problemas para cruzar Reforma e Insurgentes.
“Si fue efectivo que establecieran la contingencia, pero desafortunadamente en la radio ya se anunciaron algunas marchas y plantones, entonces no sabemos cómo se va a poner al rato”.
Un cielo medio nublado y la posible lluvia que se avizora hacen que los capitalinos tengan la esperanza de que se levante la fase de contingencia, aunque nos preguntamos qué pasará después, declara José Luis, quien comentó que por Lindavista llovió ayer en la noche.
Para algunos, el dejar de usar sus automóviles resultó una molestia, sin embargo fue benéfica la gratuidad en el transporte público, como el Metro.