La ex modelo y cantante Carla Bruni, primera dama de Francia desde hace dos años, intervino personalmente para intentar frenar errores de comunicación del entorno presidencial frente a rumores sobre su matrimonio con el mandatario Nicolas Sarkozy.
“Estos rumores son insignificantes y no tienen importancia para nosotros”, declaró Bruni el miércoles a la radio francesa Europe 1, saliendo al cruce de declaraciones del entorno presidencial sobre rumores que circulaban desde hacía varias semanas.
Bruni, de 42 años, que se casó con Sarkozy el 2 de febrero de 2008, negó la existencia de una conspiración contra ella y su marido, de 55 años, en el marco de una intervención pública que para el diario francés Liberation (izquierda) muestra que “la presidencia de bulevar continúa”.
“No hay complot. No hay venganza. Esto no nos afecta y hemos pasado página desde hace tiempo”, sostuvo Bruni antes de negar la existencia de una investigación policial para determinar el origen de los rumores.
“No hay ninguna investigación policial. Es inimaginable”, afirmó la primera dama de Francia contrariamente a lo que aseguró el mismo día el jefe de la Dirección Central de Inteligencia Interior (DCRI, contraespionaje), Bernard Squarcini.
“A principios de marzo (…), el director general de la policía nacional, Frederic Pechenard”, solicitó “efectuar una pesquisa informática para llegar hasta el punto de partida y si era posible (determinar), la fuente” de tales rumores, dijo Squarcini a la AFP.
Todo comenzó a principios de marzo, días antes las elecciones regionales, cuando un blog albergado por el servicio en línea del dominical Le Journal du Dimanche (jdd.fr) decía que según rumores mundanos parisinos, la pareja Bruni-Sarkozy estaba atravesando dificultades.
El 25 de marzo la dirección de JDD, propiedad de Arnaud Lagardere, cercano a Sarkozy, anunció la renuncia del director general del sitio internet y del autor del blog, contra quien el grupo de prensa Hachette presentó una demanda. La fiscalía de París, que depende del ministerio de Justicia, abrió además una investigación preliminar.
El caso reapareció esta semana luego de que uno de los consejeros políticos de Sarkozy, Pierre Charon, saludara la decisión de la fiscalía y evocara “un complot organizado” contra el presidente y su esposa.
El abogado de Sarkozy, Thierry Herzog, se interrogó sobre las motivaciones de quienes propagaron rumores que atribuyen “sin fundamentos, tener relaciones” extramatrimoniales al presidente francés y su esposa.
Según el JDD, las sospechas del Elíseo sobre el origen de los rumores se orientaban hacia la ex ministra de Justicia, Rachida Dati, ofuscada porque el gobierno le retiró el coche oficial y sus tres guardaespaldas.
Dati negó esos alegatos.
Altos cargos del gobierno saludaron la intervención de la primera dama, quien según una secretaria de Estado ha demostrado un “verdadero sentido de Estado”. El portavoz del gobierno, Luc Chatel, dio el caso por “cerrado”, pero el asunto no parecía ir por ese camino.