Las bandas del crimen organizado que operan en esta frontera están decididas a lanzar un mensaje de intimidación: no están jugando. Hace cuatro dÃas amenazaron a choferes y concesionarios del transporte local con atacar a los pasajeros si se negaban a pagar una â??cuotaâ? de 10 mil pesos mensuales por unidad. Y cumplieron.
Ayer, a las 8:30 horas, un grupo de sicarios disparó ráfagas de ametralladora contra la unidad de la Ruta 1-B que circulaba sobre la avenida Manuel Talamás Camandari, de poniente a oriente, en Senderos de San Isidro. La ofensiva se dio en el momento en que pasajeros abordaban la unidad. Nadie resultó lesionado.
El ataque se suma a otros seis que se han registrado en los últimos dÃas. El denominador común refiere a un grupo armado que le prende fuego a los vehÃculos para luego huir.
El atentado con armas de fuego se registró a dÃas de que concesionarios recibieran amenazas de atentados contra pasajeros, de no pagar las â??cuotas de protecciónâ? de hasta 10 mil pesos que exigen sicarios que se autoidentifican como miembros de La LÃnea, el brazo armado del cártel de Juárez.
Los presuntos sicarios de La LÃnea accionaron sus armas contra el motor y las llantas de la unidad, la que quedó varada sobre la avenida, mientras que los ocupantes descendieron para buscar refugio. Tanto el operador como todos los pasajeros resultaron ilesos.
Horas después, otro grupo de supuestos sicarios llegó hasta el lugar exacto del atentado contra el camión de pasajeros y abrió fuego contra una ferreterÃa.
La serie de ataques alimenta la sicosis colectiva, ya que le otorga credibilidad a la amenaza. Los concesionarios advierten como inminente el dejar de prestar el servicio por falta de garantÃas