Dígame algo, en serio, usted, usted amigo lector, ¿cree que solamente México tiene problemas económicos en el Mundo?
Permítame decirle que la locomotora de Asia, que es China, ha demostrado ya dos cuestiones que han dejado al analista mas taimado del mundo con los ojos abiertos al ver el porcentaje de desaceleración tan garrafal y prominente que viene registrando este gran país.
El Producto Interno Bruto Chino cayó ya este primer trimestre del año, o sea en lo que va de cifras ya contables y verificables, 1.5 por ciento, una caída que no se veía desde hace cerca de 12 años en su economía que viene creciendo hace casi 15 en tasas superiores del 6 por ciento.
¿Y que me dice de la inversión extranjera directa?
Lo voy a poner en una forma que cualquiera lo podrá entender.
La inversión extranjera directa que no es aquella que nada mas llega a comer migajas de pan en los mercados bursátiles y financieros de las ciudades chinas, sino que llega y abre fabricas u oficinas en su país, se contrajo 22,5 por ciento en abril respecto al mismo mes del año anterior, lo que supone el séptimo mes consecutivo de caídas, según informó hoy el Ministerio de Comercio chino.
¿Sabe cómo están con estas cifras ya, en el ministerio de economía, trabajo y claro esta, políticas de aquel país?
Asustados. No, no es consuelo para México, tenemos nuestros propios problemas, pero aun no andamos en dichos valores, ¿estamos?