En una evaluación realizada por la DEA se asegura que en medio de las pugnas internas por el poder y desorden del Cártel del Golfo y Los Zetas, éstos pueden sufrir un “agandalle” de su territorio en Nuevo León y Tamaulipas.
“Las luchas internas por el poder y el desorden sufrido por los del Cártel del Golfo y Los Zetas son también propensos, contribuyendo a la expansión del CJNG.
El CJNG se encuentra en una posición privilegiada para aumentar sus operaciones de tráfico de drogas”, señala el documento de la DEA.
Y se informa que el Cártel Jalisco Nueva Generación llegó a los límites de la ciudad de Nuevo Laredo, Tamaulipas, con el municipio de Anáhuac, Nuevo León.
Cabe recordar que en esta zona elementos de la Secretaría de Marina capturaron a Miguel Ángel Treviño Morales “Z40”, en un operativo preciso por aire en caminos despoblados que unen ambas entidades.
La detención se habría realizado en agosto del 2013 a 27 kilómetros al suroeste de Nuevo Laredo.
Sin embargo, versiones apuntan a que fue en el municipio de Anáhuac, Nuevo León, justo en el límite con Tamaulipas.
Este sector es considerado por autoridades federales como un bastión zeta.
De acuerdo con la DEA, el CJNG llegó para disputar esa zona, calificada como un punto estratégico para el trasiego y paso de droga hacia los Estados Unidos.
Sin embargo, existe otra versión que pareciera tener lógica, pues se habla de una posible alianza entre el Cártel del Golfo y Cártel de Jalisco para controlar este sector.
Se afianzan Los Beltrán pero…
En cuanto el área metropolitana de Nuevo León, en San Pedro, municipio con el más alto ingreso per cápita en México, el Cártel de Los Beltrán Leyva se afianzó en este territorio.
Sin embargo, fuentes federales consultadas por Reporte Indigo revelan que el Cártel Jalisco Nueva Generación podría buscar pelear la plaza de San Pedro a los Beltrán Leyva.
Y es que sería el municipio perfecto para iniciar, en una primera etapa, la operación en la distribución de cocaína y metanfetaminas al menudeo.
“En una segunda etapa podría ser el lavado de dinero. San Pedro está perfecto para que los líderes de ese grupo puedan pasar desapercibidos”, aseguró la fuente federal.
Esta versión coincide con el documento de la DEA en poder de este medio.
La sola presencia del Cártel Jalisco Nueva Generación, en Nuevo León, abre la puerta para que vaya extendiendo su operación en este estado, advierte la agencia antidrogas.
“El CJNG utiliza sus alianzas y explota las debilidades de los cárteles rivales para hacerse cargo de nuevos territorios o aumento su presencia en las zonas” explica el documento de la DEA.
Motivo por el cual crece la posibilidad de que CJNG dispute por el territorio sampetrino a los Beltrán Leyva.
En Monterrey, el Cártel del Golfo y Los Zetas se disputan la entidad, pero según la DEA, la presencia del Cártel de Jalisco está creciendo en otros estados y puede disputar la capital de Nuevo León.
“Desde su bastión en Jalisco, la influencia de la organización se extiende a Nayarit, Colima, Guerrero, Veracruz, Michoacán y otros estados mexicanos”, asegura la DEA.
Además, este cártel se ha posicionado en el estado de Veracruz, zona controlada por el Cártel de Los Zetas en los últimos años.
Cabe señalar que la rivalidad entre Los Zetas y CJNG se viene arrastrando desde hace casi ocho años, por lo que autoridades federales y norteamericanas prevén una guerra llena de alta violencia.
De grupo armado a cártel
La historia en el mundo del narcotráfico se repite.
Tal como sucedió con el Cártel de Los Zetas, que pasó de brazo armado del Cártel del Golfo a una organización en el tráfico de drogas, ahora el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) experimenta una transformación similar.
Y es que el CJNG surgió en 2007 como grupo armado, que se denominó “matazatas” al servicio del Cártel de Sinaloa.
Por medio de la Red dio pruebas de su existencia, pues videograbó interrogatorios y ejecuciones a varios zetas.
“Jalisco, tierra de libertad y gente de trabajo. Muerte a los secuestradores y extorsionadores zetas”, se aprecia en un video difundido en Youtube por el CJNG.
Y al igual que Los Zetas, el CJNG ha hecho uso de la violencia para demostrar su poder.
Esta organización atacó a instalaciones de medios de comunicación en Jalisco, mientras Los Zetas lo realizaron a cadenas locales de televisión en Nuevo León en 2010.
También, el CJNG adoptó operaciones zetas. Es decir utilizó narcobloqueos, fosas clandestinas en los límites de Jalisco y Michoacán; y ha participado en la desaparición de civiles ajenos al crimen organizado. Y no queda ahí.
Las autoridades de Jalisco le han atribuido participación en crímenes de altos funcionarios, como el de Jesús Gallegos, secretario estatal de Turismo, ocurrido en 2013, y el del alcalde panista de Ayutla, Manuel Gómez Torres, en el 2014.
Otro hecho que desató caos en Jalisco ocurrió en marzo del 2012 cuando autoridades capturaron a Érick Valencia “El 85”, uno de los fundadores del grupo CJNG, en una de sus casas en la colonia Lomas Altas, en Zapopan.
Horas después de la detención de Valencia, se realizaron 16 narcobloqueos con 25 vehículos incendiados y enfrentamientos, que cobraron la vida de dos personas: el chofer de un autobús del transporte público y un presunto sicario.
El mismo caos que se vivió en Jalisco lo había ya padecido Nuevo León.
Como ejemplo, la captura de Héctor Raúl Luna Luna “El Tori”, quien era un líder de la plaza para Los Zetas, ocasionó al menos 42 bloqueos.