Como cada año, mujeres y hombres exponen y venden en la explanada de la catedral de Tulancingo con cientos de ramos tejidos de palma con motivo del Domingo de Ramos, día en la que se profesa la fe para los católicos y fecha con la que se da inicio a la Semana Santa recordando la entrada de Jesús a Jerusalén
De acuerdo con la religión católica, el Domingo de Ramos conmemora la entrada de Jesús en Jerusalén, cuando se colocaron ramas de palma en su camino, antes de su arresto el Jueves Santo y su crucifixión el Viernes Santo, los ramos de palma u olivo son bendecidos previo a las procesiones y representa la fecundidad y riqueza.
Como cada año la artesana Piedad Martínez viaja desde Aplizaco, Tlaxcala, a la ciudad de Tulancingo para vender ramos de palma, cáliz de sotol y cruces de madera y trigo elaborados por ella y su familia, y llevar, como ella menciona, un poco de fe a los hogares
Ella junto a su familia elaboran cerca de 3,000 piezas que también vende en Iztapalapa los días previos al Domingo de Ramos; el resto del año, elabora artesanías de temporada como casas de madera para decorar el árbol navideño, las velas y flores de migajón para el 2 de febrero, Día de la Candelaria; y otros productos de mercería.
Durante la Semana Mayor se celebran distintas muestras religiosas; posterior al Domingo de Ramos, en el calendario católico se conmemora el Jueves Santo, el 28 de marzo, con el Triduo Pascual y la eucaristía en la última cena; el Viernes Santo, el 29 de marzo, la pasión y muerte de Jesús y el Sábado de Gloria, la vigilia pascual y resurrección de Jesús.