Comunidad internacional busca impulsar diálogo de paz en Afganistán. El Grupo de Coordinación Cuadrilateral (G4), que forman Estados Unidos, China, Pakistán y Afganistán, tratará de cerrar hoy una hoja de ruta que impulse el proceso de reconciliación entre el gobierno afgano y los talibanes.
A 15 años de conflicto afgano, las partes involucradas en la crisis del país del sur de Asia tratan de integrar a los talibanes de forma directa a las negociaciones, pero los radicales extremistas se encuentran fragmentados tras la muerte de su máximo líder Mulá Omar.
Sin embargo, Sartaj Aziz, asesor sobre temas de Política Exterior de la oficina del primer ministro de Pakistán, Nawaz Sharif, se ha mostrado confiado en el éxito de esta convocatoria.
“Estamos seguros de que este proceso puede conseguir una significativa reducción de la violencia en Afganistán. Tenemos que poner todo nuestro esfuerzo y energía en conseguir que siga encarrilado”, aseveró durante su discurso de apertura.
Será un proceso lento, de todas maneras, porque el gobierno afgano cree que las primeras conversaciones directas con los talibanes no tendrán lugar como mínimo hasta dentro de seis meses, según el jefe del Ejecutivo, Abdulá Abdulá, un puesto semejante al primer ministro.
“Es posible”, apuntó Abdulá esta semana, ya “que hay grupos entre los Talibán que están dispuestos a hablar y renunciar a la violencia”.
En el encuentro participan el viceministro afgano de Exteriores, Hekmat Jalil Karzai, el miembro del Alto Consejo para la Paz de Afganistán, Zeerak Yousufi, el asesor de Exteriores paquistaní, Sartaj Aziz, y el secretario de Exteriores paquistaní, Aizaz Ahmad Chaudhry.
La reunión también cuenta con la presencia del representante especial de Estados Unidos para Afganistán y Pakistán, Richard Olson, el embajador estadunidense en Pakistán, David Hale, el enviado especial de China para Afganistán, Deng Xijun, y el embajador chino en Pakistán, Sun Weidong.
El gobierno afgano y el Talibán mantienen congelado el proceso de diálogo que comenzaron hace seis meses en Pakistán y que se vio frenado por el anuncio de la muerte del mulá Omar, al que sucedió el mulá Mansur, que dio origen a una disputa interna entre los talibanes.
La formación del G4 se fraguó en la V Conferencia del Corazón de Asia, que acogió Islamabad en diciembre de 2015, en reuniones multilaterales, pero sobre todo en encuentros bilaterales como el mantenido entonces por el presidente afgano, Ashraf Gani, y el primer ministro paquistaní, Nawaz Sharif.
Desde entonces el G4 se ha reunido en dos ocasiones en enero en Islamabad y Kabul, en la que mostró su respaldo a un proceso sin condiciones previas con los talibanes, a quienes pidieron que acepten participar en las conversaciones de paz.
La hoja de ruta que está destinada a guiar los esfuerzos para iniciar un diálogo de paz entre el gobierno afgano y militantes islamistas fue una idea de China.
Los cuatro países han discutido “sección por sección” en plan y ahora están en un punto donde puede ser adoptado.
“Hay casi un acuerdo sobre la adopción de la hoja de ruta y seguir adelante. Se estableció que sería una iniciativa bajo la aprobación de las partes en conflicto en Afganistán, y que progrese al ritmo que ellos deseen “, dijo una fuente oficial sobre la reunión.
Las partes esperan que el gobierno afgano haga una invitación a las facciones de los talibanes que desean negociar la paz y en abril iniciar la etapa final del proceso, pero dependerá si los extremistas responden a la oferta del diálogo