La ciudad de Seattle se convertirá en la primera en Estados Unidos en permitir que los conductores de las compañías de transporte privado basadas en teléfonos celulares, como Uber y Lyft, a que formen sindicatos.
Tras la votación unánime 8-0 del concejo municipal, seguidores de la decisión celebraron con sus carteles de ‘Unión de Conductores’, pero el alcalde Ed Murray dijo que no firmaría la ley y que probablemente tenga que pasar por un proceso judicial.
La nueva ordenanza requeriría que las compañías den a la ciudad una lista de sus conductores locales. El sindicato podría entonces usar la lista para construir respaldo de parte de los conductores para ser su representante en negociaciones por mejores pagos y condiciones laborales.
La votación del concejo es una victoria para la Asociación de Conductores Basados en Apps de Seattle y una derrota tanto para Uber como para Lyft. Los conductores en otras partes del país podrían observar a Seattle y determinar cómo proceder en sus propias ciudades.
La ordenanza “amenaza la privacidad de los conductores, impone costos sustanciales a los pasajeros y a la ciudad y choca con leyes federales de larga data”, dijo la portavoz de Lyft Paige Thelen. Mientras tanto, Uber se enfrenta a una demanda colectiva en California de parte de conductores que quieren ser empleados a tiempo completo y no contratistas.
Algunos expertos dicen que la ciudad violó leyes que indican que la posibilidad de que los conductores formen sindicatos cae en jurisdicción del estado, no de la ciudad. El concejo Tom Rasmussen dijo antes de la votación que la amenaza de demandas judiciales no debía detener a los concejales de pasar la ordenanza.