Una mujer herida que fue detenida tras disparar al edificio del consulado estadounidense en Estambul ha sido identificada como integrante de una agrupación izquierdista proscrita, informó la agencia estatal turca de noticias.
La agencia Anadolu informó el lunes que la policía identificó a la agresora como Hatice Asik, de 42 años, y dijo que pertenece al grupo de izquierda radical Frente Ejército Revolucionario de Liberación del Pueblo, conocido por sus siglas DHKP-C.
El grupo se atribuyó un ataque suicida contra la embajada de Estados Unidos en Ankara en 2013, en el que murió un guardia de seguridad turco.
Dos atacantes abrieron fuego contra el consulado estadounidense en Estambul y provocaron un tiroteo con la policía antes de huir del lugar, según medios turcos.
El ataque se produjo horas después de un atentado con bomba en una comisaría de Estambul en el que resultaron heridos tres policías y siete civiles. El ataque desencadenó un incendio y el derrumbe de parte del edificio de tres plantas.
Los agresores hicieron explotar un automóvil cerca de la comisaría, según la policía. Más tarde, agresores desconocidos dispararon a los policías que investigaban el lugar de la explosión, provocando otro tiroteo con los agentes en el que murieron dos de los atacantes y un miembro del equipo investigador de la policía.
También el lunes, rebeldes curdos en la provincia suroriental de Sirnak dispararon contra un helicóptero que transportaba reclutas que habían terminado su servicio o estaban de permiso. Los rebeldes mataron a un recluta e hirieron a otro, según el ejército. Otros cuatro soldados murieron en la provincia de Sirnak cuando una bomba caminera estalló al paso de su vehículo blindado, indicó la agencia de noticias Dogan.
Los ataques se producen en un repunte de la violencia entre las fuerzas de seguridad turcas y los rebeldes del Partido de los Trabajadores del Curdistán, o PKK.
También coinciden con la nueva actitud más activa de Turquía en la lucha contra los milicianos del grupo Estado Islámico. Ankara bombardeó el mes pasado posiciones del grupo EI en Siria y aceptó permitir que la coalición liderada por Estados Unidos emplee sus bases en la lucha contra el grupo extremista. La decisión siguió a un atentado suicida atribuido al grupo EI en el que murieron 32 personas, y después de que milicianos de EI dispararan a soldados turcos desde el otro lado de la frontera con Siria y mataran a un soldado.
El ejército estadounidense anunció el domingo que un destacamento de seis cazas F-16 había llegado a la base aérea de Incirlik, en el sur de Turquía, para unirse a la lucha contra los milicianos del grupo Estado Islámico.
Turquía realizó el mes pasado una gran operación de seguridad con unos 1.300 detenidos por supuestas relaciones con organizaciones terroristas, incluidos el PKK, el grupo EI y el DHKP-C.
Agentes de Estados Unidos trabajaban con las autoridades turcas para investigar el último incidente, señaló la embajada estadounidense. El consulado permanecerá cerrado al público hasta nuevo aviso, añadió la embajada.
Policías con chalecos antibalas y ametralladoras bloquearon las calles que llevaban al consulado. El edificio, sin embargo, permanecía intacto y la bandera ondeaba en su mástil.