La Comisión Europea (CE) ha insistido hoy en que los casos de gripe porcina en humanos no tienen que ver con el consumo de carne de cerdo e incluso ha abogado por cambiar el nombre de la enfermedad por “nueva gripe” para evitar pérdidas económicas a los productores de ese sector.
La comisaria europea de Sanidad, Androulla Vassiliou, ha mostrado, en rueda de prensa, el interés de la CE por bautizar como “nueva gripe” la infección que se ha confirmado en humanos en México, EEUU ó España, con el fin de que los ciudadanos no la asocien más con el sector porcino.
Vassiliou ha señalado que “se ha llamado gripe porcina y no es el caso”, por lo que con el cambio de nombre se evitaría los efectos negativos que la alarma por la propagación de la enfermedad puede provocar en el sector ganadero porcino.
La responsable de Sanidad ha recalcado que la infección no se transmite por la ingesta de carne o derivados del cerdo y ha resaltado que su consumo es “seguro”.
Por otro lado, un experto de la dirección de Sanidad de la CE que pidió el anonimato, ha admitido que el origen de la enfermedad que ahora se está propagando entre las personas fue la transmisión por un cerdo, pero la variedad de la gripe llamada porcina (H1N1) que ahora preocupa es distinta.
Esa variante es el resultado de cuatro virus: uno de gripe humana, otro de gripe aviar, otro de gripe porcina de América y otro de gripe porcina de Europa.
Según la fuente, los productores de cerdo y los veterinarios de Europa no deben tomar medidas adicionales a las habituales para evitar la gripe porcina, ante la situación actual.
Asimismo, desde la CE han recordado que si un cerdo está infectado puede transmitir la enfermedad por vía aérea y las posibilidades de contagiar a humanos son inferiores que en el caso de la gripe aviar.
En el cerdo, el virus se queda en los pulmones mientras que en las aves llegaba a la sangre, según la misma fuente