La compañía alemana Continental, dedicada al sector automotriz desde 1871, dejó de ser sólo un fabricante de neumáticos y ahora también apuesta por el desarrollo de la movilidad inteligente.
La empresa lanzó también su prototipo de vehículo autónomo, con el que el conductor interactúa con la computadora de la unidad para permitir que se maneje por sí misma